Me permito hacer una reflexión considerando los eventos recientes a propósito del sismo que sacudió nuestro país este 27 de febrero de 2010.
Me he preguntado incesantemente si nuestro país es realmente solidario, en primera lectura y de acuerdo a la forma en que se respondió por parte de la ciudadanía en ayuda a las víctimas de este terremoto, podríamos decir sí. Chile es realmente un país solidario, cómo no? Si en un par de días se montó un aparataje marketinezco y así todos los chilenos pudiésemos aportar con dinero para la construcción de viviendas de emergencia.
Ahora haciendo una doble lectura y dándole algunas vueltas, la verdad es que me aparecen algunas dudas. La idea de hacer una teletón me parece bien creo que es necesario crear estas instancias en la cual un país entero se ponga de acuerdo en juntar una cantidad determinada de dinero y desde algunas fundaciones esta ayuda se canalice y vaya en ayuda focalizada de los mas necesitados. Pero es necesaria tanta parafernalia?. La verdad es que ahí es donde discrepo, por cuanto, es sabido que las grandes corporaciones económicas de nuestro país se presentan por “cadena nacional” haciendo aportes “solidarios” de varios millones de pesos y que a vista de los televidentes es realmente espectacular y filantrópico, pero que les sirve como gran negocio al momento de declarar sus impuestos y al hacerse marketing. Sin lugar a dudas entregar cien, doscientos o trescientos millones de pesos deducibles de impuestos, en cadena nacional y dando la imagen de ser una empresa responsable socialmente y que va en ayuda de los mas necesitados es un muy buen negocio desde el punto de vista del marketing (es necesario saber cuales son los valores que pagan por treinta segundos en un spot publicitario, sólo en la emisión de un programa de tv y en un solo canal), Negocio redondo.
Luego llegan los aportes de las personas comunes y corrientes, de cualquier parroquiano e hijo de vecino, que algunos con gran esfuerzo y otros con menos, en forma anónima hacen también aportes significativos, pero esta vez no de millones sino algunos pesos y en algunos casos unos cuantos miles. Aquí me detengo un poco, me parece que es aquí donde podemos decir que somos solidarios, puesto que existen personas de pocos recursos y es más, hay personas que incluso se vieron afectados por el terremoto y que hicieron su aporte de todos modos.
Chile: país solidario?. Nuevamente me pregunto y se me viene la imagen de un millonario de melena rubia repartiendo billetes a diestra y siniestra a personas de recursos limitados por las calles de distintas ciudades de chile (preterremoto), regalando sándwich a los asistentes del festival de Viña del Mar (jaja.. me acordé de la película lluvia de hamburguesas) o cuando este último festival de Viña (2010) luego de cenar en un céntrico restaurante viñamarino dejó de propina un millón pesos a los garzones sin antes anunciárselos casi mediante megáfono y cuanto estaba toda la prensa farandulera desde su limusina. ¿Esto es ser solidario? ¿Esto es filantropía? ¿Esto es lo que queremos?. Esta vez, posterremoto, se le vio entregando ayuda sobre un camión obviamente con la prensa apostada en palco, nuevamente con la prensa reportado hace entrega de unos 30 millones de pesos en cuncumen, para una comuna que está con problemas diciendo “que vaya a otra comuna que no sea Iloca ni Duao, ya que les dejé comida para dos semanas”, sin comentario. Hay personas que no conocen el significado de dignidad, tal vez no para aplicárselos a ellos mismos sino para aplicarlo a la gente de menos recursos. Los pobres también tienen dignidad.
¿Somos realmente solidarios?, Las campañas revisadas y principalmente la teletón son buenas desde el punto de vista de ayuda y en unas horas conseguir grandes sumas de dinero. ¿Ayuda a la identidad nacional?, como elemento de marketing suna muy bien “Chile ayuda a Chile”, “Chile ayuda al Norte”, “Chile ayuda al Sur”, y un largo etc. Durante 27 o 30 horas somos todos hermanos y buenos samaritanos, durante 27 o 30 horas nos elevan a lo más alto nuestro espíritu chovinista y nuestro amor por un Chile Solidario, “Vamos Chile”, “Vamos que se puede”, es decir “Chile País Solidario”. La pregunta surge casi como una iluminación. Y ¿qué pasa con el resto de horas que componen un año entero?. ¿Qué pasa con los necesitados durante el año?, ¿Qué pasa con la sociedad chovinista y amante de este país fura de las 27 o 30 horas de amor?, ¿Qué pasa con este Chile Unido?... Estacionamientos preferenciales para discapacitados acaparados por ciudadanos “solidarios” pero que no tienen ningún impedimento físico, filas preferenciales para ancianos, personas con alguna discapacidad o mujeres embarazadas o con bebés muy menores, copadas por jóvenes y no tan jóvenes sin ninguna limitante ni características que le otorguen este beneficio. Empresarios (los mismos que “donan” millones de pesos que despiden y buscan flexibilidad laboral extrema para seguir despidiendo empleados, los mismos que pagan gratificaciones mensuales para no hacerlo anualmente y entregar sumas más elevadas (y que corresponden) a sus empleados, estos mismos que quieren eliminar el sueldo mínimo y garantizar a lo menos un sueldo digno. Los mismos Bancos que “donan” grandes cantidades de dinero producto de los excesivos cobros de intereses. Algo parecido ocurre con las Isapres que también “donaron”, me imagino que parte de los grandes ganancias producto de los cobros excesivos y desproporcionados de los planes de salud (mas de algún peso correspondería también al rechazo de licencias médicas y excedentes que no fueron cobrados nunca por los cotizantes y que prescribieron). Las AFP´s que también están presentes en los momentos complejos y “donan” parte de las ganancias obtenidas producto de los cobros por administración (vale recordar que las pérdidas producto de las inversiones son absorbidas por los cotizantes y no por las AFP´s). Y así más y más… podríamos seguir con los retails y otras medianas y grandes empresas que “donan” dineros deducibles de impuestos.
Ahora a seguir reflexionando si realmente somos o no un País Solidario.
